Los Veteranos de una orquesta juvenil venezolana, aun activos después de los años

" Los venezolanos nunca estaremos lo suficientemente agradecidos a José Antonio Abreu por la obra de vida, esperanza y amor que nos ha regalado, porque la música es vida, es esperanza y es amor. Son justamente esas orquestas las que reflejan el país que nos merecemos todos, un país de excelencia, de conocimientos, de cultura, un país de todos y para todos, en el que realmente quepamos todos." (1)



El Sistema Nacional de Orquestas Juveniles e Infantiles de Venezuela suele dar como referencia inmediata la actuación de niños y jóvenes.
Evidentemente su nombre lo alude. Sin embargo, esta institución, fundada por el maestro José Antonio Abreu, celebra sus 30 años, y vale decir que a lo largo de esas tres décadas han sido muchos los niños y jóvenes que han hecho carrera en sus filas. Hasta crecer y hacerse adultos y profesionales. De hecho, la misma agrupación creció: primero fue Orquesta Juvenil de Caracas, luego de Venezuela, fueron surgiendo los núcleos y demás instituciones aledañas (conservatorio, escuela de luthería, instituto universitario), se multiplicaron las orquestas, y hoy en día lo que se llama Sinfónica de la Juventud Venezolana Simón Bolívar aglutina al menos tres grupos de distintas edades.
Hoy en día encontramos músicos, como Graciela Miranda, Florentino Mendoza y Frank Di Polo, que fueron de los primeros integrantes de aquello que comenzó con una gran carga de "vamos a ver"; y aunque en la actualidad no son ni infantiles ni juveniles, continúan formando parte activa y entusiasta del sistema.
Para estos tres músicos hay una gran diferencia entre los años setenta y la actualidad, especialmente cuando se manifestaba el deseo de dedicarse al arte sonoro. La respuesta era invariable: "estudia algo serio".
La travesía de estos tres orgullosos pioneros _con más o menos apoyo familiar_ pasó por lo de "comerse las verdes", pues hoy en día, cualquier madre o padre estallaría de orgullo si su vástago manifiesta sinceramente el deseo y vocación por ser músico.

Fuente:
(1) Carolina Jaimes Branger - Los Puntales de la democracía (Opinión - El Universal- 23/01/06)
http://tiempolibre.eluniversal.com/2006/01/23/til_art_23338A.shtml