El venezolano Álvaro Pérez Miranda, asesor planetario

Durante 20 años, el venezolano Álvaro Pérez Miranda se ha especializado en idear restaurantes en Japón y Estados Unidos. Ahora promete inaugurar, bajo su asesoría, varios locales en Caracas. Ha abierto 70 restaurantes y comenzó como mesonero en Los Ángeles, vivió 15 años en Japón y allí logró montar una compañía que asesora en todo a quienes deseen abrir sus locales gastronómicos. Luego de estrenarse también en Nueva York, apostó por Caracas, donde tiene planes gigantes

ROSANNA DI TURI rdituri@el-nacional.com
FOTOGRAFÍA CLAUDIA RODRÍGUEZ R. claudiarromero@yahoo.com

La historia del venezolano Álvaro Pérez Miranda merece una buena dosis de asombros. Él la cuenta en dos platos: comenzó como mesonero en Los Ángeles y ahora preside Metromet, una compañía que promete diseñar restaurantes a la medida de cualquier ambición y en la que idean desde la decoración y la carta hasta cómo debe ser el servicio. Lo más peculiar es que lo hace en Japón, Nueva York y este año se inicia aquí en Venezuela.
Pero él –en tono y explicaciones– parece ajeno a su propia historia. Sin aspavientos puede esbozar, en 40 minutos –no tiene más tiempo para la entrevista–, la geografía gigante de sus planes y ambiciones para este año, en el que promete abrir varios restaurantes en Caracas. "Ahora dicen que Perú es la capital gastronómica de Suramérica, pero yo quiero traer más locales que contribuyan a que sea Caracas esa capital", dijo sentado en la Cuadra Gastronomía en una apurada visita a Venezuela. Y esboza un número contundente como aval: "Como asesor he abierto 70 restaurantes".
CURRÍCULO CON JET LAG INCLUIDO
Su recuento empieza en Los Ángeles, en tiempos de otras ambiciones: mientras estudiaba diseño, trabajó de mesonero en el restaurante Il Forno y el embeleso que le produjo ese entorno, devino en su carrera planetaria.
"Empecé diseñando el logo de un restaurante en Beverly Hills, y comencé a meterme en la parte creativa de los locales: su diseño, sus muebles, pensando siempre en la armonía del negocio".
La historia daría un brinco planetario cuando le tocó llevar el concepto de Il Forno –un local casual de California del que ahora es socio– a Japón, país donde viviría 15 años. "Llegué a Tokio en 1991 y trabajé en la segunda compañía de alimentos y bebidas de Japón, con 300 y pico de restaurantes. Allí vi una oportunidad increíble. Se me despertó el deseo de hacer restaurantes".
En ese mercado ajeno que ya conocía,abrió su propia compañía de asesoramiento con un cliente de lujo: el Wembley Stadium de Inglaterra, que entonces buscaba asesoría para los restaurantes de los estadios que abriría en Japón. Pero tiempo después el gigante se fue del país nipón y dejó al venezolano sin su gran cliente, pero no sin futuro. "Me asocié con un japonés y en nueve años abrimos 33 restaurantes, cada uno con un concepto distinto: italiano, chino, francés. Fue una compañía joven pero de veloz crecimiento".
Cuando aquella sociedad se rompió,el venezolano siguió en Japón con su compañía Metromet. Allí tuvo clientes como Shidax, un gigante del karaoke con sus propios restaurantes. E incluso se atrevió a abrir Canela: un local latinoamericano con chef venezolana. Allí Thamara Alvarado –ahora en Catar– sirvió hallacas y bollos pelones en un mercado donde esas recetas eran una gran incógnita.

B ACK TO VENEZUELA

Canela cerró, pero de aquella apuesta quedó el vínculo entre los dos venezolanos –Pérez y Alvarado– que encendió la iniciativa en estas tierras. ¿Por qué no traer Metromet a Venezuela? Los planes caraqueños de Álvaro Pérez comenzaron este año, promete traer varios restaurantes que existen afuera, asegura que ya tiene los socios acá y hace un recuento de lo que hace. "Nosotros ofrecemos un estudio de mercado previo y podemos diseñar la carta, el mobiliario y el diseño interior de cada restaurante. Después proporcionamos asesoría si el cliente lo pide. Brindamos todo el servicio de la A a la Zeta". Incluso a veces se da el lujo de decir que no, según cuenta. "Armani nos pidió que le hiciéramos un café. Pero él ya tiene todo su estilo establecido. No necesita nuestra asesoría".
Entre los que sí le deben su autoría reciente está 57, que lleva el concepto neoyorquino a Tokio y Seven Square en Nueva York. "Estoy trabajando en varios proyectos para Caracas. Quiero aprovechar las relaciones que he cultivado durante 20 años para traer esos restaurantes acá". Los nombres, por ahora, se los reserva. Pero promete ciertos adelantos: Uno, que el equipo que lo acompañe pueda aprovechar sus conexiones internacionales. "Ahora mismo Thamara se fue a España a hacer unas pasantías con Miguel Sánchez, que es de los mejores cocineros hoy en día". El resto, está en agenda.

Fuente: El Naciona Todo en Domingo