El famoso presentador de televisión dijo a los periodistas que cuando termina un libro "es como si una piel inmensa se desprendiera de mí", y esto es lo que ocurrió en 1991 con esta obra, que su autor ha calificado como una narración de aventuras, un "Huckleberry Finn caribeño".
Tras subrayar que se encuentra en el mejor momento de su vida, después de cumplir los 40 años en septiembre y casarse con su novio Rubén en febrero, el presentador con Ana García Siñeríz del programa "Channel número 4" ha defendido la vigencia del título del libro como metáfora de que lo "imposible es lo que cuenta".
A su juicio, en la obra hay un retrato de la Caracas de finales de los ochenta y principios de los noventa, "con personajes marginales, más allá de la periferia del poder y del dinero, que, sin embargo, consiguen penetrar en ese mundo, igual como ha pasado después con el 'chavismo' que ha cambiado las reglas del juego, para bien o para mal en Venezuela".
Entiende Izaguirre que forma parte de una nueva generación de autores suramericanos, con el ya fallecido escritor chileno Roberto Bolaños o con el peruano Jaime Bayly, que "nos quisimos separar de Macondo", en referencia al colombiano García Márquez, y apostaron para que "el inmenso realismo mágico pudiera dar espacio a otro tipo de fantasmas, aunque al final uno termina conciliando ambos mundos y es el mismo hecho de escribir lo que nos aporta una mayor felicidad a todos".
Respecto a sus proyectos literarios, dijo que ahora el programa "Channel número 4" le absorbe casi todo su tiempo, aunque no descarta en un futuro próximo escribir un libro que tuviera que ver con el concurso de "Miss Venezuela", uno de los "rasgos culturales" más importantes de su país de origen.
Boris Izaguirre, que se ha definido a sí mismo como "frívolo, inteligente y desmesurado", ha publicado hasta el momento, además de "El vuelo de los avestruces", las novelas "Azul petróleo" y "1965", y es autor de los ensayos "Morir de glamour", "Verdades alteradas", "Fetiche" y "El armario secreto de Hitchcock".
Fuente: El Aragueño
No hay comentarios.:
Publicar un comentario