Trabaja a partir de fotografías digitales en las que captura el juego de luz y sombra sobre objetos y superficies, que luego trabaja con acrílico. En estas obras se produce también un juego entre lo digital y lo manual, entre la fotografía y la pintura.
He estado siempre asombrada, fascinada por la condición humana de vivir, de conjugar en su existencia distintas dimensiones en forma simultánea. El impulso por explorar esta fascinación convocó, desde el comienzo de mi vida como artista, al collage como método de trabajo. Con el tiempo la fotografía y la pintura interactúan también simultáneamente, para dar forma a mi proceso creativo.
Mi trabajo apunta a la interacción de ámbitos múltiples en un espacio, una compilación visual de fragmentos, polaridades y simultaneidades.
Desde el año 2002, el punto focal ha sido la interacción entre las dimensiones densas y sutiles de la existencia dentro del contexto urbano. Intento resaltar la sincronicidad entre las sensaciones y percepciones íntimas que ocurren y cambian contínuamente, a menudo en contrapunto con el ámbito colectivo de la experiencia humana. En este sentido he realizado obras que exploran la percepción de elementos de la naturaleza dentro del ámbito urbano: el aire, el agua. Actualmente estoy trabajando la polaridad luz-sombra.
Al enfocar la atención en un determinado aspecto de la realidad cotidiana, en este caso ese ámbito donde la luz y la sombra juegan, danzan, vibran sobre los objetos que miramos diariamente; se despliegan mundos, posibilidades de percepción diferentes a la habitual, como si nos adentrásemos en realidades paralelas.
La tendencia mundial actual hacia la polarización crea distancia y separación y obstaculiza las posibilidades de relación con la diversidad. En esta muestra intento crear, dentro de la galería, una experiencia que ofrezca formas de conectar e interactuar con una dimensión sutil que coexiste, entretejida con la percepción de la polaridad.
El 15 de Abril de 2006 se inauguró la exposición Polaridad y Espacio interior de la artista venezolana Toña Vegas en la ADD GALLERY de la ciudad de Hudson, New York.
En esta muestra la artista realiza una instalación en la que el espacio de la galería y las obras, múltiples, conforman una especie de universo holográfico, en donde tanto la totalidad del espacio como las obras individuales se pueden mirar como el todo y las partes. En los muros de la galería está representada la polaridad luz–sombra y las obras, que surgen de la exploración fotográfica de los juegos entre la luz y la sombra, sugieren “ventanas que integran la polaridad y miran hacia otras posibilidades, alternativas a este paradigma de la percepción”
Fuente:
El Mundo
Analitica
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